Tony Iommi fue el tercer guitarrista de Jethro Tull, antes de que ocupara el puesto Martin Barre, quien ha sido el miembro más constante de la banda, después de Ian Anderson.
Iommi no estuvo mucho en Jethro Tull. Apareció en una grabación promocional del concierto de 1968 patrocinada por los Rolling Stones llamada Rock and Roll Circus que permaneció inédita durante décadas. The Who, John Lennon, Eric Clapton y Marianne Faithful también estaban en el proyecto junto con Tull and the Stones.
Iommi recuerda su breve permanencia en Jethro Tull en el año 1968:
«Ian Anderson me preguntó si estaría interesado en unirme a ellos. Hablé con la banda [Black Sabbath] y pregunté: ‘¿Qué creéis que debería hacer?’. Ellos dijeron: ‘Deberías ir a por ello’. Y yo dije: ‘¡Oh, gracias! (Risas.)»
«No me sentía muy cómodo con eso» – dice Iommi -. «Incluso cuando fui al ensayo con ellos, me llevé a Geezer Butler conmigo. Le dije a él después: «No me siento feliz con esto». Simplemente me sentía raro. Le dije (a Butler): «Vamos a reunir a la banda«.
«Quería trabajar yo mismo, realmente. Recuerdo que fui a ver a su manager y él me dijo: ‘Tienes mucha suerte de estar en esta posición’. Y dije: ‘Bueno, tengo suerte porque me quieren. No es porque es suerte’ «.
«Por entonces no nos llamábamos Black Sabbath, sino Earth. Me fui con Jethro Tull durante un corto espacio de tiempo, pero no era mi sitio. Regresé [a Black Sabbath] y reuní a la banda de nuevo; con Ozzy, Bill y Geezer.
Nuestra primera canción fue ‘Wicked World’, y la segunda canción que hicimos fue ‘Black Sabbath’ [posteriormente lanzada en el álbum de 1970 Black Sabbath]. Y ése fue nuestro punto de referencia«.
Iommi comenta que aprendió de Anderson mientras estuvo en Jethro Tull: «Aprendí de su forma de trabajar, que era muy diferente a la forma en que nosotros trabajábamos». “Aprendí que tienes que trabajar en ello. Tienes que ensayar. Cuando regresé y volví a juntar a Earth, me aseguré de que todos estuvieran despiertos temprano por la mañana y ensayando. Solía ir a recogerlos. Yo era el único en ese momento que podía conducir. Solía tener que conducir la maldita furgoneta a las nueve menos cuarto cada mañana; que era temprano para nosotros entonces. Les decía: «Así es como debemos hacerlo porque así lo hacía Jethro Tull«.
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