Grupo: Deriva
EP: Haiku I
Año: 2019
Procedencia: Madrid
Estudio: TMF Studios
Management: Nooirax Producciones
Reseña: Eva Plaza
Mañana. 6 de septiembre, se publica Haiku I, el nuevo trabajo en formato EP de los madrileños Deriva. Haiku I se resuelve bajo el auspicio de Nooirax Producciones en la edición, y en la grabación, mezcla y masterización por Álex Cappa en The Metal Factory Studios.
Haiku I va a catapultar al equipo como uno de los estandartes del post-rock patrio. Lo digo sin preámbulos; creo que es cuestión de tiempo que alcancen la cresta de este estilo de música que se ha dado en llamar «underground», pero que me gustaría que se tildase de «mainstream» para que fuera un género musical popular y muchos oídos supieran lo que se han estado perdiendo.
La portada del EP refleja su contenido: un «poema sonoro» minimalista que perfila distintos aspectos de la cotidianeidad, como la estructura de origen japonés a la que hacen referencia. Debo decir también que este artwork me parece precioso. Ha sido diseñado por Álvaro Cubero, y me recuerda en cierta forma al estilo de las portadas de Noah Histeria y de El Tubo Elástico.
¿Qué encontramos en Haiku I? Tres canciones como tres versos que hablan por sí mismos. Un post-rock de progresiones armónicas que nos dejará una grata huella en los oídos. En su nota de prensa, se dice que en la obra de Deriva coexisten » la contundencia del rock/ metal y la intensidad del emo/hardcore con rasgueos de inspiración flamenca, experimentación rítmica de corte progresivo e incluso la épica de la música cinematográfica».
El tríptico se inicia en ‘Lluvia Templada’, un tema relajante nada más comenzar con un punto de inflexión a los pocos segundos, en el que la formación se sirve de un trampolín sonoro marcado por la batería. Más adelante, el cuarteto juega con graves y agudos, escribiendo una melodía onírica a la par que perturbadora. ‘Despierta del Letargo’ toma el relevo con un bombardeo percusivo que es acompañado por un deje electrónico hasta disolverse en una especie de math metal que me evoca a TesseracT o al djent de Their Dogs Were Astronauts. Poco antes de la mitad del minutaje, la melodía se hace con el mando, y relega a la crudeza instrumental a un segundo plano. Más tarde, se emparejan estos claroscuros, finalizando con una partitura caótica.
‘Cerezos Sin Flor’ despliega la batería mientras hace énfasis en un sentimiento de tristeza y desolación, o al menos es lo que me parece a mí. El djent vuelve a hacer acto de presencia, aunque convive con un post-rock de pretensiones robóticas. Hacia el final, se vuelve a hacer hincapié en armonías de composición más calmada.
En definitiva, Haiku I es un notable trabajo, y la única pega es que tres canciones saben a poco. Habrá que esperar a un disco completo. No perdamos de vista a Deriva.
Reseña: Eva Plaza
Nota: 8.5 / 10
Tracklist:
- Lluvia Templada
- Despierta del Letargo
- Cerezos Sin Flor
Formación:
Minchy – Guitarra
Muñi – Guitarra
Álvaro – Batería
Yago – Bajo